En su ánimo de mejorar las condiciones de vida, Rosa Morocho, una microempresaria de 48 años, decidió incursionar en el negocio de la venta de cosméticos por catálogo. En un inicio vendía principalmente a sus compañeras de trabajo, así como a sus familiares y vecinos. Su calidez y buen trato han hecho que su base de clientes aumente en un 40%, aunado al hecho de que ha podido abastecer un poquito su negocio por lo que ahora puede entregar los pedidos inmediatamente y no esperar hasta que la compañía se los envíe. Rosa vive en Catamayo, provincia de Loja, Ecuador, y vive con su esposo Celso Celi quien trabaja como albañil. Tiene cuatro hijos, pero solo la última vive con ella. Ambas trabajan durante el día en un restaurante de la ciudad. Después de su trabajo, ella se dedica a visitar a sus clientes, tanto para entregar pedidos como para mostrar los catálogos. Rosa se siente orgullosa de haber podido contribuir con los gastos de la casa, así como con la educación de sus hijos ya que dos de ellos son policías. Ahora, Rosa está solicitando un crédito de $ 2000 para comprar mercadería como perfumes, labiales, bases liquidas, bases en polvo, correctores, rubores, esmalte, sombras, cremas así como también para comprar productos de belleza naturales. El préstamo será cancelado en 18 cuotas mensuales.